Death and all his friends (3/5)
Por fin llego la noche de la junta y todo parece que por fin las cosas se podrán arreglar...
La reunión será en uno de los restaurantes mas lujosos de la ciudad, y nada mas y nada menos que con uno de los competidores directos de mi Corporación, mi hermano, un viejo enemigo con muchos problemas y pocas palabras... Ademas de toda mi familia mas cercana.
Muchas cosas nos perdimos como hermanos, crecimos rápido y siempre fuimos rivales, y cuando murió mi padre las cosas se fueron al extremo; Creo que eso pasa siempre que tu padre es un magnate del petróleo y siempre te vió a ti como el favorito; eso marca a cualquiera.
Llego al salón y me informan que mi familia aún no llega, así que decido entrar y pedir una copa de vino mientras espero. Esta reunión es multipropósito, cenaremos con mis demás hermanos y mi madre, ella verá que todos estamos bien y que a pesar de nuestras diferencias somos capaces de tolerarnos y cenar decentemente, al menos frente a ella.
Aparecen mis hermanos menores, ellos aún estudian y me cuentan como les va en su vida. Hace no mucho tiempo yo jugaba con ellos. El tiempo pasa demasiado rápido; Deprimente, Muy Deprimente.
Mi hermano enemigo es el último en llegar, viene vestido elegantemente al igual que yo y saluda a todos, besa en la cabeza a mi madre y saluda con mucha animosidad, me da la mano y sonrío, sé que no es sincero, y el sabe que lo sé. La cena transcurre con normalidad.
A traves de nuestras secretarias acordamos el plan que esperaríamos y seríamos los últimos en irnos del restaurante, tenemos un par de asuntos de los que no queremos que mi madre sepa.
Con el tiempo se van todos y poco a poco hasta que quedamos solo el y yo:
Digo: -¿y bien? ¿que tiene que decirle Abel a Caín?- le digo con curiosidad, siempre me gustaba provocarle.
-No vinimos a medir egos por ahora, así que te propondre algo directo y simple; Este país no necesita dos petroleras, así que cambia de rubro, mudate a algo mas, tengo a la junta directiva de mi parte y mis ideas son mejores que las tuyas, no quiero obstaculos en este camino.
Dice la verdad, siempre fue mejor que yo para mover las influencias de los demas, y el puesto que busca lo pondrá en el ojo público por un buen tiempo. Será mayor que yo.
-Pides mucho y das poco, como siempre, eso no pasará, por dos razones, una, soy el mayor, y llevo mas tiempo que tú en esto. No tendras que moverte y trabajaras para mí, ganaras muy bien y estaras callado. Nunca toleré tus delirios de grandeza y no sera excepcion.
Nos miramos por unos minutos, la guerra pasa de verbal y a mental y sé que removi las piedras correctas, corté el cable rojo y la bomba estalló sin matar a nadie, era lo que quería.
-Bien, dejaremos esto para luego, puesto que ninguno de los dos cederá.- Esto no lo ví venir- Pidamos un último vino, nos iremos cada quien a su casa, y pensaremos sobre esto, solamente no creas que me has ganado-Sonríe-.
Pedimos el vino, solamente dos copas, tinto, cosecha del 74, huele a menta, y algo extraño pasa con el mesero y él, algo que no sabría como describir, algo extraño, pero lo ignoro, tomamos el vino.
En segundos todo gira, y mi cabeza vuela, el permanece inmovil frente a mí sin decir ninguna palabra, nada, ni un sobresalto. Le pregunto que hizo y dice -Nada, tu te lo hiciste solo- Se levanta y se va. Con lo que me queda me levanto y lo tomo por el cuello, le digo que pagara, lo amenazo y veo su rostro, ni una pizca de miedo o duda. Este no es mi hermano. Aleja mis manos de él y caigo al suelo de bruces. El se va y dice:
No me culpes, tu te lo hiciste solo.
Se va y todo se oscurece.
La reunión será en uno de los restaurantes mas lujosos de la ciudad, y nada mas y nada menos que con uno de los competidores directos de mi Corporación, mi hermano, un viejo enemigo con muchos problemas y pocas palabras... Ademas de toda mi familia mas cercana.
Muchas cosas nos perdimos como hermanos, crecimos rápido y siempre fuimos rivales, y cuando murió mi padre las cosas se fueron al extremo; Creo que eso pasa siempre que tu padre es un magnate del petróleo y siempre te vió a ti como el favorito; eso marca a cualquiera.
Llego al salón y me informan que mi familia aún no llega, así que decido entrar y pedir una copa de vino mientras espero. Esta reunión es multipropósito, cenaremos con mis demás hermanos y mi madre, ella verá que todos estamos bien y que a pesar de nuestras diferencias somos capaces de tolerarnos y cenar decentemente, al menos frente a ella.
Aparecen mis hermanos menores, ellos aún estudian y me cuentan como les va en su vida. Hace no mucho tiempo yo jugaba con ellos. El tiempo pasa demasiado rápido; Deprimente, Muy Deprimente.
Mi hermano enemigo es el último en llegar, viene vestido elegantemente al igual que yo y saluda a todos, besa en la cabeza a mi madre y saluda con mucha animosidad, me da la mano y sonrío, sé que no es sincero, y el sabe que lo sé. La cena transcurre con normalidad.
A traves de nuestras secretarias acordamos el plan que esperaríamos y seríamos los últimos en irnos del restaurante, tenemos un par de asuntos de los que no queremos que mi madre sepa.
Con el tiempo se van todos y poco a poco hasta que quedamos solo el y yo:
Digo: -¿y bien? ¿que tiene que decirle Abel a Caín?- le digo con curiosidad, siempre me gustaba provocarle.
-No vinimos a medir egos por ahora, así que te propondre algo directo y simple; Este país no necesita dos petroleras, así que cambia de rubro, mudate a algo mas, tengo a la junta directiva de mi parte y mis ideas son mejores que las tuyas, no quiero obstaculos en este camino.
Dice la verdad, siempre fue mejor que yo para mover las influencias de los demas, y el puesto que busca lo pondrá en el ojo público por un buen tiempo. Será mayor que yo.
-Pides mucho y das poco, como siempre, eso no pasará, por dos razones, una, soy el mayor, y llevo mas tiempo que tú en esto. No tendras que moverte y trabajaras para mí, ganaras muy bien y estaras callado. Nunca toleré tus delirios de grandeza y no sera excepcion.
Nos miramos por unos minutos, la guerra pasa de verbal y a mental y sé que removi las piedras correctas, corté el cable rojo y la bomba estalló sin matar a nadie, era lo que quería.
-Bien, dejaremos esto para luego, puesto que ninguno de los dos cederá.- Esto no lo ví venir- Pidamos un último vino, nos iremos cada quien a su casa, y pensaremos sobre esto, solamente no creas que me has ganado-Sonríe-.
Pedimos el vino, solamente dos copas, tinto, cosecha del 74, huele a menta, y algo extraño pasa con el mesero y él, algo que no sabría como describir, algo extraño, pero lo ignoro, tomamos el vino.
En segundos todo gira, y mi cabeza vuela, el permanece inmovil frente a mí sin decir ninguna palabra, nada, ni un sobresalto. Le pregunto que hizo y dice -Nada, tu te lo hiciste solo- Se levanta y se va. Con lo que me queda me levanto y lo tomo por el cuello, le digo que pagara, lo amenazo y veo su rostro, ni una pizca de miedo o duda. Este no es mi hermano. Aleja mis manos de él y caigo al suelo de bruces. El se va y dice:
No me culpes, tu te lo hiciste solo.
Se va y todo se oscurece.
Comentarios
Publicar un comentario